Taiwán: Kaohsiung
Un grupo de extranjeros juega al Frisbee en el mar, hay adultos y niños que, por la cercanía con la que se relacionan, se diría que son familia. Se ríen, sobretodo los más pequeños. Sus carcajadas activan las mañas más íntimas del corazón e, inevitablemente, me traen algunos recuerdos de mi infancia en la playa, del juego en las mañanas luminosas de verano, de la mirada amable de mi padre, de aquellos días en los que nosotros fuimos ellos, cuando nuestras carcajadas también rompían el cielo azul plano y nítido de Málaga para, desde allí, caer al mar y teñirlo todo de colores. El mar... Nosotros no jugábamos al Frisbee, sino a la pelota, pero para el caso es lo mismo. Estamos en una playa de Kaohsiung, más bien en la playa de una isla de Kaohsiung. No es una de esas islas paradisiacas sinónimo de envidia, es todo lo contrario, de arena negra y con un horizonte repleto de grandes barcos mercantes, ya que Kaohsiung es el puerto más importante de Taiwán. Sin embargo, aunque no estemos rode...